Una Amarilla seguro

Es probable que Battaglia sume su 5ª amarilla en La Plata, no sólo porque Messera puede exigirle un corte con falta sino por un clamor nunca visto ni escuchado desde diversos foros. Que se discuta un gol o un penal erróneamente sancionados es parte de la tertulia futbolera del lunes, pero que se debata acerca de la pertinencia de una tarjeta ¡amarilla! es efectivamente inédito e inaudito.

No se pone tanto énfasis para dilucidar si Sand (en capilla desde la 12ª fecha, al igual que Seba) mereció castigo por protestar un offside o empujarse con un defensor en los frecuentes roces que protagoniza en las vecindades del área. También sería interesante saber si Islas, uno de los arqueros top del torneo, demoró un saque o le protestó al árbitro en los últimos tres partidos: él también carga con cuatro amarillas y debería reemplazarlo Ardente -ex San Telmo- si acumula otra en Rosario. Convengamos que hay incoherencias. Un mismo juez expulsa a Tevez, amonesta a Saja y perdona a Verón luego de un "festejo desmedido".

De la Justicia y de quienes la aplican se espera un trato igualitario, sin discriminaciones entre ricos, pobres, famosos e ignotos, así en el deporte como en otras actividades. A Riquelme, que no debería preocuparse por las opiniones de un palquista, lo acusan ahora de "incitación a la violencia". No lo hicieron esos funcionarios con Barrientos, el de San Lorenzo, que al salir por cambio en la Bombonera, apenas un mes atrás, se fue escupiendo indecencias delante de una tribuna llena.