“No estoy desesperado, sí preocupado”

Borghi está intranquilo por la demora en las renovaciones y la llegada de otro defensor. "Hace falta tiempo para que entiendan el sistema".

"El Mundo Boca? Es llamativo. El peaje hay que pagarlo siempre, pero ya van dos veces que no me lo cobran. Ojalá sean muchas veces más. Por el momento esa es la ventaja de ser técnico de Boca".

Claudio Borghi apenas se ríe cuando cuenta ese primer beneficio por el solo hecho de pertenecer, de las bondades que implica su nuevo cargo. De lo que no se ríe ni un poco el Bichi es cuando llega el momento de hablar de refuerzos y renovaciones, se lo nota impaciente, intranquilo por la falta de algunas definiciones. Los quiere tener a todos ya y no puede. No asoman más sonrisas luego de esa inicial.

-Ya conociste las primeras ventajas de ser el técnico de Boca, ¿qué es lo que te preocupa?

-Que todavía no podamos estar completos, hablo en cuanto a la cantidad de jugadores que pretendemos, a los que estamos buscando y los que tienen que renovar. No estoy desesperado pero sí preocupado.

-¿Qué es lo que más te preocupa de que lleguen tarde los refuerzos?

-Hay dos formas de trabajo: obligar y convencer, yo prefiero lo segundo. Para eso hace falta tiempo para que entiendan el sistema. Por ejemplo, Cellay es un especialista en la última posición, ahora hay que conversar a Muñoz que no está acostumbrado a jugar de stopper. Y no tengo tantos defensores, hay cuatro. Tampoco me gusta darles responsabilidades defensivas de entrada a los chicos.

Yo digo que hay jugadores que son muy buenos titulares y otros que son muy buenos suplentes. Los chicos hasta ahora son buenos suplentes. Y de la misma forma, no encontramos a los carrileros. Si vos le decís a un jugador que ya no es marcador de punta, que es carrilero, a veces se desorienta.

-Esta semana tuviste la posibilidad de hablar con Riquelme, ¿qué impresión te dejó?

-La primera fue verlo llegar. Vi que se amontonaba toda la gente y pensé: "Pasó algo o llegó alguien muy importante". Y era Juan. Muchos se preguntan qué hablamos y me recuerda a lo que pasó en la cancha de Argentinos, cuando se acercó y me habló al oído. Y lo único que me dijo fue: "Me debés un asado porque yo ya te invité a uno". Ahora hablamos del Mundial, de su rodilla, de la chance que tiene de llegar. Bah, de quedarse.

-¿Y se va a quedar?

-Si es por lo que escucho, me vuelvo loco. Y si es por el presidente, estamos bastante bien. Seguridad al 100% no te puede dar nadie, pero yo no estoy pidiendo un 10 ni un 9 porque creo que en un 90% se van a quedar.

-Si no es Caruzzo buscarás otro o lo vas a esperar también...

-Caruzzo no tiene historia en Boca. Estamos hablando que no hay plazos porque ellos son jugadores que están en la historia de Boca. A los ídolos se los espera hasta el último día. Y en el caso de Juan, más. Porque está lesionado. A los ídolos se los protege.